martes, 29 de noviembre de 2011

Para ti y para mí, el mundo puede esperar

Es lo curioso de las necesidades; a veces cuando las cubres... dejas de necesitarlas. Cuando llevas mucho tiempo queriendo algo, persiguiéndolo con todas tus ganas, frustrándote cuando no veías avances y dándolo todo por conseguirlo, simplemente porque crees que es lo que puede salvarte y... De repente, de repente esa persona está delante de ti, de repente estás volviendo a besarle, le estás acariciando, le estás abrazando, estás respirando el mismo aire que respira... Es extraño, porque, en ese mismo momento alcanzas el cielo, alcanzas el cielo y todo lo demás da igual. Da igual el mundo que te rodea, dan igual las demás personas, la hora, el lugar... simplemente estás en una burbuja en la que todo es perfecto. Tal y como creías, tal y como soñaste durante tanto tiempo.

No hay comentarios: